ActionCOACH Lic. María
Inés Morán
A lo largo de mi carrera, es común que me
contacten personas preocupadas por lo difícil que les parece mantener sus
expectativas de ventas, o lograr que sus clientes cierren un trato.
La mayoría de ellos son verdaderos profesionales en el área, aunque
suelen descuidar detalles que les impide alcanzar sus objetivos.
Recuerdo especialmente un
encuentro, donde mi interlocutor se encontraba muy preocupado por el
drástico declinar de las ventas de su negocio como consecuencia de las
dificultades económicas en que suelen verse envueltos algunos países, lo
que ha hecho a los consumidores más cautelosos y escurridizos, con toda
razón, por ser ellos, también, victimas de esas dificultades.
Un cliente poco colaborador, no define la
culminación de la negociación, por el contrario, puede y debe convertirse en el
comienzo de una fructífera relación comercial. A todos nos interesa sostener
una concordancia de ganancia mutua durante un pacto comercial, ya sea una
compra simple o la adquisición de un servicio. Es pues, la preparación previa a
la negociación el auténtico secreto para lograr los resultados que
esperamos.
He aquí como puedes trabajar las 6 razones más comunes por las cuales
las personas no compran tu producto o servicio y prepararte para superarlas
-Confianza. Si el cliente siente
desconfianza de ti o de tu empresa, es difícil que decida entregarte su
dinero. La confianza tiene que iniciarse en ti mismo, sabiendo que el
producto o servicio que tu negocio ofrece es ventajoso para quien lo adquiera,
¿Crees que lograrías mejores resultados?, pues aplícalo y me cuentas. Para
generar esa seguridad, hay que otorgar información honesta sobre el producto
o sobre tu capacidad de brindar el servicio, así como no descuidar la
imagen personal , pulcritud en los folletos y los sitios web.
-Interés. Hay que comenzar con la
pregunta ¿Por qué lo que ofrezco debe ser interesante para mi
cliente? Para despertar la atención de tu prospecto, debes investigar
las razones por las cuales nuestro producto le puede interesar: al definirlo
con claridad, habrás logrado la mitad de la venta.
-Necesidad. En ocasiones, un
artículo o servicio puede parecer interesante pero innecesario. Debes
saber que la acción de comprar se concreta, la mayoría de las veces, por
impulsos emocionales y no por aspectos técnicos. En consecuencia, hay
que encontrar esas fuentes del deseo que harán no sólo necesario, sino apetecible,
lo que estás ofreciendo.
-Recursos. Dentro de las capacidades
financieras de cada quien, no es el dinero el que decide la compra.
Cuando se logra captar el interés de tu cliente y despertar en él la necesidad
de adquirirlo, debes trabajar con el convencimiento de que la
utilidad que representa para el consumidor es extraordinariamente mayor que la
inversión económica realizada.
-Temporalidad. Cuando no hay apuro
en concretar la compra, a pesar de reconocerse sus bondades, ¿Será que no has sabido
hacerle entender claramente la utilidad y el beneficio que otorgará tu
producto?. ¡Corrige tu mensaje de ventas! Puedes otorgar fechas
límites con beneficio en la inversión, recordar lo reducido del stock o brindar
razones que provoque el sentido de urgencia en el comprador y que lo incentive
a decidir el cierre del trato lo antes posible.
-Seguimiento. Al menos la mitad de las
ventas se pierden por falta de seguimiento al comprador: Cerca de un 20%
de las transacciones comerciales se concretan durante el primer
encuentro, esa cifra crece en un 10% si se hace un segundo esfuerzo con
los indecisos e incluso al tercer o quinto contacto se logra cerrar alrededor
del 5% de los tratos restantes. Aunque hay que evitar caer en
conductas acosadoras, un seguimiento inteligente del prospecto dará su fruto en
un alto porcentaje de las veces.
Depende de cómo te prepares y trabajes para
triunfar, dedicando tu esfuerzo a minimizar o anular las razones que pueda
exponer el prospecto para no cerrar el trato. Pocas cosas
brindan más satisfacción en las ventas que ganar un cliente que inicialmente
tuviese reservas sobre lo que le ofreces y, a pesar de eso, lograr cerrar
el trato luego de derribar, con argumentos, las razones por las
cuales declinaba el negocio.
¡Éxito!
Los 6 Juegos Preliminares de la toda VENTA
ResponderEliminarExcelente artículo, aplicandolo cuidadosamente cada uno de estos puntos se puede seguramente llegar a alcanzar las metas a las que quieres llegar en tu negocio, Gracias por compartir!
ResponderEliminarMuchas gracias Silvia por tu comentario!
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